Es la historia de amor (1925) entre Jeanne Rucar y Luis Buñuel. Una larga historia de amor y de total renunciación. Lo interesante de estas memorias es el contraste entre la vida pública y la vida privada, entre el mundo frívolo y permisivo del cine y el ambiente moral y austero de la casa. Gracias a una mujer como Jeanne, Buñuel pudo ser Buñuel.